¿Qué puede provocar la falta de sexo?
¿Quieres saber si no tener sexo tiene efecto sobre la vagina? Te lo contamos.
Perder la virginidad después de las amigas, tener relaciones sexuales con frecuencia o tomar un descanso del sexo son elecciones. Y las elecciones son individuales, cada una toma la suya. Tener una vida sexual es saludable. Elegir otras formas de experimentar el placer también lo es. Toda mujer es libre de decidir qué hacer con su vida íntima.
Pero ¿alguna vez te has preguntado qué puede causar la falta de sexo?
Mira, la falta de sexo puede, de hecho, causar atrofia vaginal. Vamos a entender esto.
¿Qué es la atrofia vaginal?
Los estadounidenses llevaron a cabo un estudio y descubrieron que no tener relaciones sexuales durante largos períodos de tiempo puede provocar atrofia vaginal.
En la atrofia vaginal, las paredes de la zona íntima femenina se vuelven más delgadas, lo que puede causar ardor, picazón, dificultad para orinar y dolor en el sexo. Por lo general, esta situación ocurre en mujeres que están entrando en la menopausia, cuando los niveles de estrógeno, una hormona sexual, comienzan a disminuir. En la menopausia, la menstruación se vuelve cada vez más irregular hasta que desaparece por completo.
Pero ¿qué tiene que ver la atrofia vaginal con el sexo?
Cuando tenemos sexo solas o acompañadas, nos excitamos y esto aumenta el flujo sanguíneo en nuestra área íntima. Además, durante el acto sexual el cerebro libera estímulos que provocan la liberación de adrenalina, una hormona que causa la dilatación de los vasos sanguíneos en la región genital y en el clítoris, que es en gran medida responsable del placer de la mujer. Todo esto, junto con la lubricación vaginal.
Esta conversación un tanto científica describe la sensación de bienestar e incluso euforia que experimentamos cuando tenemos relaciones sexuales. Además de hacernos sentir muy bien, la excitación y el orgasmo son saludables para la vagina precisamente debido al aumento del flujo sanguíneo, que fortalece las paredes vaginales.
El estudio estadounidense dice que experimentar placer puede ayudar a mantener una vagina saludable. El flujo sanguíneo oxigena la región y fortalece el tejido, evitando la atrofia vaginal.
Ahora, no te obsesiones con esto ni piensa que debes estar siempre dispuesta para el sexo, ¿de acuerdo? No todas tenemos ganas de sexo a todo momento. Hay etapas en la vida en las que no estamos interesadas en salir con nadie ni tener relaciones. Pero recordemos que podemos dar placer a nosotras mismas, ¡y esto es muy bueno y beneficioso!
Al igual que las relaciones sexuales con otra persona, la masturbación puede excitarnos y provocar orgasmos, lo que fortalece y mantiene saludable la zona íntima 😉
Respeta siempre tus deseos y recuerda que experimentar placer no es motivo de vergüenza, ya sea sola o acompañada. ¡Tu zona V merece cuidado y placer!